Entre el bullicio de los pasillos y el olor a papel recién impreso, Guadalajara se prepara para su gran rito anual: la Feria Internacional del Libro (FIL). Del 29 de noviembre al 7 de diciembre, la ciudad mexicana emprenderá su 39º edición, transformándose en un hervidero de ideas, voces y páginas que cruzan fronteras, reuniendo a lectores, autores y editoriales de todo el mundo. Con más de 900.000 visitantes en su edición de 2024, 2.800 sellos editoriales de 65 países y un programa que incluye más de 3.000 actividades, la FIL es el gran epicentro de la cultura iberoamericana.
Este año, el protagonismo tiene acento mediterráneo: Barcelona, invitada de honor y declarada Ciudad Literaria por la UNESCO, desembarca con flores, memoria y una voluntad de diálogo intercultural.
Barcelona, ciudad literaria
Barcelona se presenta como una ciudad que respira literatura los 365 días del año. Su red de bibliotecas públicas, librerías de barrio, sellos independientes y grandes grupos editoriales la han convertido en la capital editorial del sur de Europa y en un puente entre lenguas y culturas.
La literatura catalana desembarca en Guadalajara en plural: en catalán y en castellano, del realismo poético a la experimentación más radical. En la delegación conviven nombres consagrados como Eduardo Mendoza o Carme Riera con nuevas voces que encarnan la energía contemporánea de la ciudad, como Irene Pujadas o Juana Dolores.
En ese mosaico de acentos y estilos florece el lema elegido por la delegación barcelonesa: «Vindran les flors». Un lema inspirado en las certeras palabras de Mercè Rodoreda, una de las voces más sensibles y poderosas de la literatura catalana. Las flores se convierten así en un símbolo múltiple: vínculo con Guadalajara, conocida como la ciudad de las rosas y evocación del Día de Sant Jordi, emblema de la cultura del libro barcelonesa. Las flores son también símbolo de renacimiento, de un ciclo que une a ambas culturas a través de la literatura.
México y España comparten una historia tejida de exilios, influencias y complicidades. México fue refugio del exilio catalán tras la Guerra Civil, y Barcelona, décadas después, se convirtió en la cuna del boom latinoamericano, hogar de escritores que encontraron allí editoriales, agentes y lectores. La FIL 2025 celebra este vínculo como una historia en permanente renovación.

El pabellón de Barcelona será una plaza viva, diseñada como punto de encuentro entre lenguas, disciplinas y generaciones. Albergará una librería con más de 10.000 títulos, charlas, recitales y exposiciones que recorrerán la historia y la actualidad de la creación barcelonesa.
Entre las actividades destacadas figuran homenajes a Joan Brossa, Carmen Balcells y Manuel Vázquez Montalbán. Además de diálogos entre escritores catalanes y latinoamericanos sobre memoria, traducción y exilio, habrán cientos de presentaciones de novedades editoriales destacadas. La programación también integrará música, ciencia, pensamiento y arte digital, reforzando la idea de que la literatura se expande más allá de la página.
La FIL, mucho más que una feria de libros
La Feria Internacional del Libro de Guadalajara es un ecosistema en movimiento. Durante nueve días conviven narradores, poetas, traductoras, músicos, cocineros, científicas, ilustradoras y pensadoras. La palabra escrita se transforma en sonido, imagen y sabor, apelando a todos los sentidos.
En los pabellones FIL Ciencia y FIL Pensamiento, figuras internacionales exploran los temas más urgentes: inteligencia artificial, feminismo, migraciones, cambio climático. Con cientos de divulgadores y expertos desgranando y analizando los temas más urgentes.
En FIL Niños, casi 200.000 pequeños lectores descubren el placer de la lectura entre talleres, cuentacuentos y espectáculos. Cientos de actividades dirigidas para familias que potencian la lectura y la escritura creativa para todo el rango de edades.
Los pasillos se llenan también de aromas gracias a Libros al Gusto, un espacio donde la gastronomía se lee y se saborea al mismo tiempo. En 2024, chefs como Begoña Rodrigo ofrecieron menús inspirados en literatos clásicos. Esta edición promete un festín compartido entre la cocina catalana y la mexicana, dos tradiciones que se encuentran en su amor por el mestizaje y el mar.
Asimismo, la música tiene su propio escenario en el Foro FIL, con conciertos que recorren géneros tan diversos como el flamenco, la cumbia, el pop alternativo y la electrónica poética. Barcelona contará con Rigoberta Bandini, Queralt Lahoz, Serrat o Mushkaa apuntando a un público intergeneracional. Cine, teatro y exposiciones de arte digital y diseño editorial completan una feria que se despliega como una ciudad cultural dentro de otra. El espacio Barcelona contará con interpretaciones de la compañía teatral la Veronal y La plaça del Diamant de Carlota Subirós.
La FIL 2025 promete una experiencia total: un mapa de lenguas, ideas y emociones donde Barcelona y México se leen mutuamente. Entre las flores de Rodoreda y las rosas tapatías, el libro florece como un puente, una celebración y una promesa de futuro. Consulta toda la programación, reservas y entradas aquí.